Licencia de Creative Commons
El hombre del sur que bajó la luz by Francisco Lara Sánchez is licensed under a Creative Commons Attribution-NoDerivs 3.0 Unported License.

30 septiembre 2009

El hombre que nunca fue anacrónico.

Buenas noches, Bada-Hell.

Esta noche toca un poco de historia humana universal. Avanzando unos 200 años en la historia nos encontramos en la siguiente situación: somos seres anacrónicos. Nos hemos desarrollado hasta tal punto que nos hemos colapsado. Estamos rodeados de toda esta magnífica tecnología y el mayor empleo que le damos es meramente masturbatorio. No digo que no disfrute de la pornografía adulta, soy un gran fan. Pero esto no es lo que se suponía que iba a ser internet. Se suponía que esto nos llevaría a la libertad de expresión, a un nivel nuevo de información compartida, cultura de libre acceso, la cultura llegaría a pegar en la puerta de nuestras casas. Pero en lugar de eso nos hemos encontrado con que las nuevas tecnologías están acabando con cosas tan simples y básicas, pero no por ello menos relevantes, como el lenguaje. Nadie tiene un segundo que perder y hay que escribirlo todo como si de un mensaje de texto se tratase. "LMFO" esto, "WTF" aquello, "LOL" lo del medio, "XQ" tal, "XRO" lo de más arriba, "XAO" lo de más abajo, KE sí y KE no.

Sí, estoy seguro de que en la mensajería instantánea hay que ahorrar letras, de acuerdo. Y sí, claro que sólo escribís así en ese contexto. Nadie escribe así cartas, ni comentarios, ni e-mails, ni exámenes (¿Acabo de decir exámenes?), ni cosas por el estilo. ¿Nos hemos vuelto tontos o es que de repente somos neandertales contemporáneos? Todos estamos sumidos en una gran ola de euforia tecnológica, gritando como monos, obviando lo analógico de nuestro legado. Sinceramente, cada vez que leo a alguien con según qué faltas de ortografía y abreviaturas muero un poco por dentro y me acerca más a esa sensación de que vamos a desaparecer irremediablemente como cultura y a reaparecer como subculturas: cada uno con su argot particular.

Deberíamos alentar a nuestras futuras generaciones al formato físico de los libros, a la correcta escritura y a la amplia comprensión de vocabulario para que nadie se quede mirándote cual arquetipo de cateto como si fueras un alienígena salido de Vulcano por hablar sin usar "acho surmano", "andevah" o "asín". Es una obligación para con nosotros mismos y para con nuestro futuro. Dentro de poco seremos personas que se dedican a masturbarse frente a la pantalla viendo pornografía infantil mientras escribe WTF en un foro y manda un mensaje de móvil con el pie para que así se asegure de su ilegibilidad. Y los pocos que sintamos un compromiso con la cultura nos convertiremos en seres normales rodeados de simios anacrónicos.

1 comentario:

  1. Y yo que estoy a favor de los e-books en lectores electrónicos...

    ResponderEliminar